Ayer miércoles por la tarde, asistí al acto de inauguración de la segunda boutique KOKER en Gijón, ubicada en un lugar muy céntrico, en el número 1 de la calle Langreo, que se celebró a las 19h con una fiesta en la que pude disfrutar de la Experiencia KOKER al completo, acompañada por varios representantes del mundo empresarial de mi ciudad.
El evento contó con la presencia de la conocida periodista y colaboradora televisiva Lydia Lozano, que es una habitual de esta firma nacional de moda femenina, como anfitriona invitada, quien tuvo para todos mejor sonrisa y las mejores palabras. Sin duda, una madrina de lujo que, como sabéis, es una de las embajadoras más conocidas de KOKER, entre otras muchas celebrities, presentadoras, rostros populares de la televisión, artistas del mundo de la música o el cine, influencers… fieles a la marca, que asiduamente visten su ropa.
Esta nueva apertura en Gijón, confirma los planes de expansión de la cadena para establecerse como un referente dentro del sector en el nivel adquisitivo medio-alto. Se trata de la cuarta tienda abierta por la entidad en la región, dos de ellas bajo la Marca Koker y otras dos bajo la de Moönimu by Koker.
No sé qué opináis vosotras acerca de esta firma en crecimiento pero plenamente asentada. En particular, yo destacaría la calidad de las prendas y el colorido de sus extravagantes diseños. Son modelos que me encantan por su versatilidad, tejido y especialmente por su optimismo y colorido, como digo. Y, por lo que he escuchado, en general, las opiniones son muy positivas.
Además, en todas las tiendas KOKER apuestan por la innovación y el uso de las nuevas tecnologías. Cada boutique cuenta con percheros expositores con pantalla Led donde se puede ver a modelos con la ropa que está expuesta debajo con la idea de mostrar el movimiento de los tejidos.
Y es que KOKER ofrece a las mujeres una oportunidad de entrar en un entorno único y encontrar combinaciones completas, outfits creados por asesoras de moda, prendas con personalidad y que siguen las tendencias. La firma cree en la mujer real y huye de las tallas pequeñas y moda para maniquíes.
Sus diseños, fabricados el 90% en España, Italia, Francia y Portugal, están pensados para la mujer actual y se adaptan a todo tipo de cuerpos. La firma ha logrado vestir así a las mujeres olvidadas por las grandes cadenas: mayores de 35 años con cuerpos reales.
Sus prendas son asequibles para todos los bolsillos; desde 4 euros hasta sus emblemáticas bikers de cuero a 199,99 euros, su producto más caro.
Gracias por la INVITACIÓN.
Fue un verdadero placer haber coincidido además con otras influencers asturianas.
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